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100 AÑOS SIN EL ORFEBRE MÁS DESTACADO DEL MUNDO, PETER CARL FABERGÉ

  • Muerte
    Peter Carl Faberge
    Centenario
    Huevos de Pascua
    Joyeria Fabergue

Se cumple el centenario de la muerte del reconocido joyero ruso, Carl Fabergé. Es muy conocido por crear los famosos huevos Fabergé, Huevos de Pascua, utilizando metales preciosos y piedras preciosas en lugar de materiales más mundanos.

¿Sabías que de los 69 Huevos de Pascua fabricados por el artesano entre 1885 y 1916, se conservan 61 en la actualidad?

El primero de ellos se lo encargó el zar Alejandro III en 1885 para regalar a su mujer, la emperatriz Maria Fyodorovna. El huevo recordaba a la patria de la emperatriz, Dinamarca, ya que el joyero se había inspirado en un huevo de pascua que se encontraba en las colecciones reales danesas y tanto agradó a la zarina que el zar ordenó que Peter Carl Gustavovich Fabergé fabricara un Huevo de Pascua cada año para la zarina, estipulando solamente que el huevo fuese único y que encerrase una sorpresa.

Entre él mismo y sus artesanos fabricaron otros 68 que adquirieron siempre la Familia Real rusa, la nobleza o la alta burguesía hasta la llegada de la revolución de 1917, que acabó con la empresa. Es por ello que la fiesta más importante del calendario de la iglesia ortodoxa rusa es la Pascua, y se celebra con tres besos y el intercambio de Huevos de Pascua.

Considerado uno de los orfebres más importantes del mundo, sus Huevos de Pascua representan la cumbre de su obra. Para ellos utilizó materiales preciosos como oro, plata, platino o paladio. Estas obras contaban en su interior con otros elementos, tallados en metales nobles y decorados con piedras preciosas. El primero de todos era un huevo de platino que contenía otro de oro que a su vez contenía una gallina.

Cada huevo imperial tenía su propio tema. Algunos eran puramente personales, otros hablaban sobre hechos históricos contemporáneos o pasados, o también sobre desarrollos tecnológicos.

BIOGRAFÍA Y OBRA

Originalmente educado en San Petersburgo, el padre de Carl, el joyero Gustav Fabergé, junto con su esposa y sus hijos, se retiró en 1860 a Dresde, dejando su trabajo en manos de gerentes experimentados y de confianza. Durante estos años Peter Carl asistió a un curso en la Escuela de Artes y Oficios de la ciudad alemana.

En 1864, se embarcó para un Gran Tour en Europa con el objetivo de visitar a los principales joyeros de Alemania, Francia e Inglaterra, y asistiendo a un curso en París, viendo objetos en museos y galerías del continente.

Sus viajes y estudios continuaron hasta 1872, cuando a los 26 años regresó a San Petersburgo y se casó con Augusta Julia Jacobs. Durante los siguientes diez años, su padre hizo posible que el maestro de Hiskias Pendin se convirtiera en su mentor y tutor para llevar el Taller de Fabergé.

Cuando Pendin falleció en 1882, Carl Fabergé fue el único responsable de llevar a cabo las actividades familiares. Obtuvo el título de Maestro Joyero del gobierno, que le permitió marcar personalmente sus objetos. Junto con su hermano Agathon, creador de diseño y un gran talento, participó en la Exposición Panasiática que se celebró en Moscú ese mismo año.

En dicha exposición, Carl obtuvo la medalla de oro del espectáculo y la medalla de la Orden de San Estanislao. Una de las mejores piezas expuestas por la familia Fabergé, fue la réplica de una preciosa pulsera de oro del siglo IV, del tesoro de Scozia y presente en el tesoro del Hermitage.

El zar, al verlo, dijo abiertamente que no era posible distinguir la reproducción de la original. A partir de ese momento, las obras de la familia Fabergé pasaron a formar parte de la colección imperial y en 1885, los artistas fueron admitidos en la corte.

La Revolución rusa acabó con la firma: La casa Fabergé continuó creciendo hasta que la I Guerra Mundial y la Revolución Rusa se hicieron sentir. Se vieron obligados a cerrar por un comité político en 1918. Poco tiempo después, él y su familia emigraron a Suiza, estableciéndose en 1920 en Lausanne, donde murió en septiembre de ese mismo año.

Falleció el 24 de septiembre de 1920, amargado por los estragos de la Revolución rusa, tres años después del comienzo de la revolución. Fue enterrado en el cementerio du Grand Jas, en Cannes, Francia.

LA CASA FABERGÉ

La joyería Fabergé llegó a ser la más grande de Rusia. Alrededor de 700 empleados trabajaban en sus diferentes filiales, ubicadas en San Petersburgo, Moscú, Odesa, Kiev y Londres.
Entre los años 1882 y 1917, el negocio de Fabergé creó alrededor de 150.000 piezas de orfebrería, fabricando entre ellas, 69 Huevos de Pascua desde 1885.

El legado de la firma familiar se prolongó tras la muerte de Peter Carl Fabergé en septiembre de 1920, hasta que fue nacionalizada por los bolcheviques y sus existencias fueron confiscadas. En 1918 el taller cerró sus puertas, llenando de incertidumbre a su creador.

En el año 1951, los descendientes de Carl Fabergé perdieron todos los derechos sobre la marca. En la actualidad la casa Fabergé sigue vendiendo joyas en sus boutiques de Ginebra, Nueva York, Londres y Hong Kong.

RECONOCIMIENTOS

Actualmente, los Huevos de Pascua de Peter Carl Fabergé son símbolo de ostentación y esplendor en todo el mundo.

Desde la Segunda Guerra Mundial han salido a subasta seis de estas obras de arte. En noviembre de 1994 el Winter Egg (creado en 1913, y que se creía perdido hasta 1984) alcanzó los 5.600.000 dólares.

Hace unos años, el 28 de noviembre de 2007, un huevo fabricado por Fabergé para la familia de banqueros Rothschild, alcanzó en subasta el precio récord de 18 millones de dólares.
 
Además, el museo Fabergé de San Petersburgo alberga algunos de los famosos Huevos Fabergé, los Huevos de Pascua más caros del mundo.